Me siento bien culero porque no tengo la capacidad de perdonar

He estado muy pendiente de las señales, el lunes, en el camino para ir a la oficina, me encontré a una chica con una playera que decía “trust your heart” y eso he estado haciendo

Fui a las librerías y estuve husmeando en los libros buscando alguno que me ayudara a salir de esto, que me ayudara a entender lo que me pasa, cuyos personajes tuvieran alguna experiencia similar a las mías, pero los libros que me llamaban eran aquellas historias sórdidas, apocalípticas, las mismas pendejadas negativas de siempre y no es que hayan dejado de gustarme esas temáticas, ni nada de eso, pero en ese momento estaba buscando algo positivo. Fue entonces que me encontré con Los Evangelios para Sanar de Alejandro Jodorowsky y no dudé en comprarlo. Según yo lo compré porque de esta manera pondría en evidencia tú hipocresía de ir a iglesia y después no tener ningún remordimiento en joderme la vida o algo así, aunque claro que el libro no habla de eso (quien dice amar a Dios miente, lo correcto es dejarte amar por Dios y transmitir su amor) la verdad no sabía bien lo que iba a encontrar; sanar, que me ayudara a sanar con las palabras de ese Dios al que vas y le rezas cada domingo.