A veces me caga comer
martes, octubre 04, 2011
En ocasiones odio tener que detenerme en lo que estoy haciendo (pendejeando en tumb1r) para comer porque tengo hambre. A veces me gustaría llegar a esa parte del futuro en que la alimentación sea solucionada con una píldora y dejar el acto de comer únicamente para satisfacer los placeres sensitivos, algo así como coger sin fines reproductivos.
Llevaba buen ritmo escribiendo, me desvelaba frecuentemente, despertaba a media noche para garabatear alguna idea en el cuaderno (que estaba colocado a un lado de la cama estratégicamente) del que no me separaba, escribía en el camión, viendo la tele y hasta cuando manejaba, en los semáforos. Pude mantenerme alejado de los videojuegos y de las series de la tele y tuve un mes muy provechoso escribiendo. Pero ohh diosa fortuna (¿odiosa fortuna?) una tarde cansado y aburrido me topé con Bored To Dead y a partir de ahí no he podido escribir nada. Esto resulta irónico porque el personaje de dicha serie se encuentra en una situación más o menos como la mía, pero bueno, nunca me ha caído bien el Jason Schwartzman y para nada hay comparación. Ahora tengo más de una semana sin escribir nada.
El jueves pasado, saliendo de la oficina, Mario y yo nos fuimos a tomar unas chelas a la torre de cristal de Chapultepec e Hidalgo. El lugar estaba solo, algo que no entiendo porque la chela esta a 2x25 y debido a la baja clientela, le pasábamos listas de rolas para que las fueran programando en el youtube y pues la plática estaba muy a gusto; mientras que en el billar de enfrente atascado a reventar con cervezas a 25 pesos y música de banda, raza a la que le gusta la mala vida o que juzga que un lugar está chido, entre más atascado esté (aunque se me hace que esa regla sí aplica con los tacos). Nos agarró una buena tormenta que aventó las sillas de la terraza y nos refugiamos en el interior. Quien sabe cuántas chelas después (muchas), llegó Carlos y sacó el cotorreo para ir a ver a Peter Hook.
Honestamente, desde que me perdí el concierto de los Chemicarnales también perdí el interés de ir a los conciertos, que viene Morrissey, buehhh…, que los Kings of Convenience, pues me gustan mucho sus rolas (en especial una que marcó una etapa de mi vida) pero puedo vivir perfectamente sin verlos, y finalmente, ni los Beatles, ni Pink Floyd, ni Led Zeppelin van a venir así que los conciertos me tienen sin cuidado (bueno, a menos que viniera a mi ciudad Broken Social Scene, sí me emocionaría mucho, pero no iría a verlos al DF).
Así que fui al de Peter Hook sin esperanza alguna. Las calles de asfalto negro reflejaban la luz del alumbrado público en sus charcos, los bodegones y fábricas rodeaban el lugar. Dentro de uno de esos grandes cobertizos, una cancha de básquet en penumbras y humo y luces estroboscópicas de colores provenían de un escenario, recordé el video de Smell Like Teen Spirit. Entramos justo cuando comenzó la presentación, corrimos dentro emocionados pero la cola de los vinos era corta así que primero me formé para comprar una doble. La verdad ya estaba bien pedo y bien loco y el ambiente estaba tranquilo, hartos hipsters aunque yo esperaba a una audiencia más punk o darketa, pero no fue así, no sé si se sintieron ofendidos porque el bajista “profanó” el legado de Ian Curtis al aventarse completito y en orden el legendario Unknown Pleasures, discazo básico y piedra angular de lo que sería el post-punk o new wave y demás sonidos etéreos en la década de los ochentas.
Noté que mucha banda no se sabía las canciones y que bueno, porque hacía mucho que no iba a un concierto donde me dejaran escuchar al grupo, y aunque Peter Hook no tiene la voz ni el carisma de Curtis, nadie mejor que él para cantar las rolas, además, el bato estuvo en New Order (una banda que a mi parecer superó a Joy División), además traía una playera del Man U y agradeció a Guanatos por haberles dado al Chicharito y pues dos tres gueyes si le echaron porras al Chicharo, pero pues que oso que te guste el panbol oooey. Además tengo entendido que el Ian era Fan los del Manchester City por lo que supongo que eso lo hubiera ofendido más que si se aventaba el disco él solito.
Fui por otra cerveza y llegué hasta adelante y al centro, frente al escenario sin mayor problema. La audiencia escuchaba atenta, el juego de luces resaltaba la figura de Hook que acaparaba el escenario, el audio estaba bastante bien y en general todo transcurría muy tranquilo, pero cuando comenzó a tocar Control yo sí me prendí y según yo intentaba bailar pero andaba tan pedo que nomás estaba empujando a la gente a mi alrededor, así que cuando me di cuenta se había formado un moshpit a mi alrededor y no quedó otra que comenzar a darle vueltas a la licuadora y golpear a los hispters a mi alrededor, lo chido es que varios sí se prendieron con el slam y muchos otros hasta se abrían paso para unirse. Me caí un par de veces pero luego luego hicieron el paro para levantarme.
Cabe decir que el Unknown Pleasures tocado en vivo (y con el paso de tantos años y de carrera de Hook) suena mucho más potente, punk y prendido que en la grabación original (que la neta, siempre se me ha hecho que está medio mal grabada pero supongo que es parte de su encanto). Y a partir de ahí el concierto fue apoteótico, disfrutando rola tras rola sintiendo como la juventud se arremolinaba a mi alrededor unidos por la música. No sé cuánto tiempo tocaron, no sé a qué hora terminó el concierto y según yo estaba esperando que tocaran alguna rola de New Order en el encoré (la que sea) o la de Love Will Tear Us Apart, pero ya no supe si lo hicieron, la noche se había devorado mi conciencia.
Llevaba buen ritmo escribiendo, me desvelaba frecuentemente, despertaba a media noche para garabatear alguna idea en el cuaderno (que estaba colocado a un lado de la cama estratégicamente) del que no me separaba, escribía en el camión, viendo la tele y hasta cuando manejaba, en los semáforos. Pude mantenerme alejado de los videojuegos y de las series de la tele y tuve un mes muy provechoso escribiendo. Pero ohh diosa fortuna (¿odiosa fortuna?) una tarde cansado y aburrido me topé con Bored To Dead y a partir de ahí no he podido escribir nada. Esto resulta irónico porque el personaje de dicha serie se encuentra en una situación más o menos como la mía, pero bueno, nunca me ha caído bien el Jason Schwartzman y para nada hay comparación. Ahora tengo más de una semana sin escribir nada.
El jueves pasado, saliendo de la oficina, Mario y yo nos fuimos a tomar unas chelas a la torre de cristal de Chapultepec e Hidalgo. El lugar estaba solo, algo que no entiendo porque la chela esta a 2x25 y debido a la baja clientela, le pasábamos listas de rolas para que las fueran programando en el youtube y pues la plática estaba muy a gusto; mientras que en el billar de enfrente atascado a reventar con cervezas a 25 pesos y música de banda, raza a la que le gusta la mala vida o que juzga que un lugar está chido, entre más atascado esté (aunque se me hace que esa regla sí aplica con los tacos). Nos agarró una buena tormenta que aventó las sillas de la terraza y nos refugiamos en el interior. Quien sabe cuántas chelas después (muchas), llegó Carlos y sacó el cotorreo para ir a ver a Peter Hook.
Honestamente, desde que me perdí el concierto de los Chemicarnales también perdí el interés de ir a los conciertos, que viene Morrissey, buehhh…, que los Kings of Convenience, pues me gustan mucho sus rolas (en especial una que marcó una etapa de mi vida) pero puedo vivir perfectamente sin verlos, y finalmente, ni los Beatles, ni Pink Floyd, ni Led Zeppelin van a venir así que los conciertos me tienen sin cuidado (bueno, a menos que viniera a mi ciudad Broken Social Scene, sí me emocionaría mucho, pero no iría a verlos al DF).
Así que fui al de Peter Hook sin esperanza alguna. Las calles de asfalto negro reflejaban la luz del alumbrado público en sus charcos, los bodegones y fábricas rodeaban el lugar. Dentro de uno de esos grandes cobertizos, una cancha de básquet en penumbras y humo y luces estroboscópicas de colores provenían de un escenario, recordé el video de Smell Like Teen Spirit. Entramos justo cuando comenzó la presentación, corrimos dentro emocionados pero la cola de los vinos era corta así que primero me formé para comprar una doble. La verdad ya estaba bien pedo y bien loco y el ambiente estaba tranquilo, hartos hipsters aunque yo esperaba a una audiencia más punk o darketa, pero no fue así, no sé si se sintieron ofendidos porque el bajista “profanó” el legado de Ian Curtis al aventarse completito y en orden el legendario Unknown Pleasures, discazo básico y piedra angular de lo que sería el post-punk o new wave y demás sonidos etéreos en la década de los ochentas.
Noté que mucha banda no se sabía las canciones y que bueno, porque hacía mucho que no iba a un concierto donde me dejaran escuchar al grupo, y aunque Peter Hook no tiene la voz ni el carisma de Curtis, nadie mejor que él para cantar las rolas, además, el bato estuvo en New Order (una banda que a mi parecer superó a Joy División), además traía una playera del Man U y agradeció a Guanatos por haberles dado al Chicharito y pues dos tres gueyes si le echaron porras al Chicharo, pero pues que oso que te guste el panbol oooey. Además tengo entendido que el Ian era Fan los del Manchester City por lo que supongo que eso lo hubiera ofendido más que si se aventaba el disco él solito.
Fui por otra cerveza y llegué hasta adelante y al centro, frente al escenario sin mayor problema. La audiencia escuchaba atenta, el juego de luces resaltaba la figura de Hook que acaparaba el escenario, el audio estaba bastante bien y en general todo transcurría muy tranquilo, pero cuando comenzó a tocar Control yo sí me prendí y según yo intentaba bailar pero andaba tan pedo que nomás estaba empujando a la gente a mi alrededor, así que cuando me di cuenta se había formado un moshpit a mi alrededor y no quedó otra que comenzar a darle vueltas a la licuadora y golpear a los hispters a mi alrededor, lo chido es que varios sí se prendieron con el slam y muchos otros hasta se abrían paso para unirse. Me caí un par de veces pero luego luego hicieron el paro para levantarme.
Cabe decir que el Unknown Pleasures tocado en vivo (y con el paso de tantos años y de carrera de Hook) suena mucho más potente, punk y prendido que en la grabación original (que la neta, siempre se me ha hecho que está medio mal grabada pero supongo que es parte de su encanto). Y a partir de ahí el concierto fue apoteótico, disfrutando rola tras rola sintiendo como la juventud se arremolinaba a mi alrededor unidos por la música. No sé cuánto tiempo tocaron, no sé a qué hora terminó el concierto y según yo estaba esperando que tocaran alguna rola de New Order en el encoré (la que sea) o la de Love Will Tear Us Apart, pero ya no supe si lo hicieron, la noche se había devorado mi conciencia.