Radiohead en México
miércoles, septiembre 05, 2012
Radiohead en Coachella 2012
Del primer concierto hay muy poco que decir, Radiohead se paró en el pequeño escenario con sus guitarras distorsionadas y tocaron los temas de Pablo Honey más algunos del el EP My Iron Lung (Parlophone, 1994) y la gente pedía que volvieran a tocar aquel hit que los catapultó a la fama.
De un concierto al otro hay un abismo de diferencia, tanto en tiempo transcurrido y puesta en escena, como en el rumbo musical que tomaría la banda, casi se podría decir que son dos grupos completamente distintos. Esta afirmación parece confirmarse por la misma agrupación, ya que en sus últimas presentaciones no tocan ningún tema de sus primeros discos y a duras penas incluyen canciones de su opera magna Ok Computer (Parlophone, 1997)
El concierto de 2009 generó cierta controversia cuando tocaron “Creep” ya que según escuché, era una especie de burla para los fans villamelones que fueron a verlos solo por esa canción o que fue una compensación por tantos años sin tocar en nuestro país. Recuerdo que fue un concierto tranquilo (no se puede esperar demasiada euforia de una banda en la que la mayoría de sus temas son de tendencia introspectiva) y el hecho curioso de que después de un par de intentos fallidos de Tom York por tocar correctamente “Exit Music (for a Film)” desistió y prosiguió con la siguiente canción.
De su concierto en Coachella no encontré muchas diferencias con su última presentación en nuestro país, siguen utilizando las mismas pantallas led que van acomodándose según el momento y que el setlist está conformado en su mayoría por temas de sus últimos discos más un par de nuevas canciones no incluidas en el mediocre (para ellos) The King of Limbs (XL Recordings, 2011) y que más o menos son de la misma tendencia.
Por el momento, yo me quedo con la imagen de la canción “The One That Got Away” de Katy Perry, cuando se la están fajando en el asiento de un Mustang mientras suena Radiohead de fondo y le parece una experiencia espiritual.
El concierto de 2009 generó cierta controversia cuando tocaron “Creep” ya que según escuché, era una especie de burla para los fans villamelones que fueron a verlos solo por esa canción o que fue una compensación por tantos años sin tocar en nuestro país. Recuerdo que fue un concierto tranquilo (no se puede esperar demasiada euforia de una banda en la que la mayoría de sus temas son de tendencia introspectiva) y el hecho curioso de que después de un par de intentos fallidos de Tom York por tocar correctamente “Exit Music (for a Film)” desistió y prosiguió con la siguiente canción.
De su concierto en Coachella no encontré muchas diferencias con su última presentación en nuestro país, siguen utilizando las mismas pantallas led que van acomodándose según el momento y que el setlist está conformado en su mayoría por temas de sus últimos discos más un par de nuevas canciones no incluidas en el mediocre (para ellos) The King of Limbs (XL Recordings, 2011) y que más o menos son de la misma tendencia.
Por el momento, yo me quedo con la imagen de la canción “The One That Got Away” de Katy Perry, cuando se la están fajando en el asiento de un Mustang mientras suena Radiohead de fondo y le parece una experiencia espiritual.