Beso Blanco (1ra parte)
lunes, enero 15, 2007
Pisteando (que es gerundio) en la casa de los amigos de mi compadre, bueno, mis amigos también; después de un millón de veces de habernos puesto hasta la madre juntos, yo creo que ya se le puede llamar amigo a alguien ¿no? Cerveza tras cerveza hasta que se acaban, y luego le seguimos con el alcohol, el pisto, lo que sea, lo que haya, tequila, brandy, ron, vino, mezcal, cualquier culo de botella sobrante de las fiestas anteriores; y aquí estamos bien estúpidos embruteciéndonos ¿Me pasa un cigarro? Como no ¿Y con qué lo prendo buey? ¿Son solares o que pedo? ¿La platica? Conversaciones de machines rines que aburren a nuestras mujeres, que si las pinches Chivas apestan, que estas pero si bien pendejo, que son el mejor equipo de México, que nel, que el Cruz Azul es el que tiene más campeonatos desde que está en primera (qué argumento más pendejo), que el América y ya, ódiame más. Y las muchachas, bien gracias, con sus caras torcidas por el aburrimiento, incapaces de platicar entre ellas porque se cagan la madre, sin embargo están aquí de aferradas con nosotros quien sabe por qué, soportando eternas discusiones bizantinas. Sí guey, pero no tienes que gritar. Pero es que así hablo, cabrón, no estoy gritando. ****
Continuara...