Beso Blanco (2da parte)
martes, enero 16, 2007
Y luego aquí es un marranero, bien que lo dijo mi vieja, estos gueyes son bien sucios, tienen bien desarreglada su casa. Ni quién se fije, la neta, no me importa, me vale madres, lo importante es pistiar y escuchar chida música y hasta eso que a mi compa no le falla, aunque me caga que diario me ande presumiendo que se bajó del Internet el ultimo disco de Quiensabequienchingados pero que es la última sensación entre el público conocedor y jamás los oirás en el radio y que si su nuevo reproductor de mp3s tipo Aypo. Porque es sólo eso, pura presunción. Deja te la pongo otra vez, para que te claves en la textura, checate las guitarra, están bien locas, como si estuvieran borrachas. Oye compadrito, ¿me haces un campito en el sofá? ¡Ahh, como no! Faltaba más. Deja me paro para que te sientes más a gusto. Que pasó cabrón, no andes albureando a mi vieja. Jajajajajaja, y todos soltamos la risotada. Pinchi pendejo, este guey se cree el muy chistosito, me caga que la gente le encuentre doble sentido a todo lo que escucha, que si el chico con suelas de hule o el pelón de las medallas, ¡sabe qué más! Ni que fuéramos chilangos, puros albures dizque de agilidad mental y verbal que lo único que hacen es demostrar su condición de homosexuales reprimidos, pinches jotos. Eit, no hagan tanto escándalo que van a despertar al niño. Si quieres mejor llévalo a dormir a nuestro cuarto comadre. Uy no, con lo fresa que es esta vieja, de loca lo va a dejar en este marranero. No, así esta bien, además ya ahorita ya casi nos vamos ¿verdad? Sí, sí, en un ratito nomás que hay que ir primero por un pomo porque este ya valió verga. ***