martes, julio 06, 2010
La ciudad sigue con su transcurso normal
Las risas de las convencías familiares
La luz del alumbrado público se refleja en el piso mojado
aun llueve
se puede escuchar el sonido de las gotas estrellarse con el pavimento
Afuera, un par de personas fuman
al entrar, un intenso aroma a flores de naranja golpea los sentidos
La tristeza se puede respirar
La gente en silencio masculla sus lágrimas
Las coronas de flores no paran de llegar
Dejando ese espantoso aroma que ahora relaciono con tu muerte
La vida sigue, pero no podrá ser lo mismo sin ti