Un sábado de fútbol (incompleto)

lunes, junio 05, 2006

Despierto con una amnesia etílica gracias a la fiesta de la noche anterior
Miro mi cara en el espejo y me veo peor que de costumbre
una barba salida de quien sabe donde, el pelo alborotado estilo afro pero en jodido y naco
los acostumbrados ojos lagañosos y vidriosos que hace tiempo dejaron de extrañarme (ustedes saben) y el familiar dolor de cabeza sabatino.
Desayuno una torta ahogada tres cuartos
(con más chile que la media y sin que se zambuta en picante como la ahogada-ahogada) y una estrellita.
Una nausea recorre mi esófago desde la parte alta del estómago hasta la garganta, espero un momento a que desaparezca y continuo bebiendo mi cerveza, aguevo tengo que meterla en mi organismo para equilibrar la sobredosis de vino, ya está mejor
¡ah pa pedota la de anoche!

Apenas son las 10:00, regreso a la casa para dormir unas horas
maldita sea esa estúpida costumbre de levantarme temprano, siempre a la misma hora
no importa que sea el primero de enero o cualquier otro día festivo (no es que éste sea alguno de esos días, es un pinche sábado cualquiera)
pero no puedo dormirme, sólo veo Tempranito con la cabeza en medio de un par de cojines
me doy cuenta que Annete Michel tiene un cierto parecido con Jenna Jameson y comienzo a pajueliarme la verga sin ganas
de una vez por todas me doy cuenta que será imposible dormir y no me decido a masturbarme
cada que siento que el orgasmo se aproxima, un comercial interrumpe la transmisión o bien Annete abre la boca y dice alguna estupidez que me corta la erección
además se acerca la hora del partido y es mejor que guarde mis reservas para rendir más en el juego.

Preparo mis cosas, reviso que todo esté completo
tacos
espinilleras
las medias están dentro de los zapatos y sólo tienen un poco de pasto seco, basta con sacudirlas para tenerlas lista
short
y mi jersey
¿dónde está la pinche playera?
¡no es posible que no pueda encontrarla siendo de color naranja chillante! (una horrible imitación de la casaca de Holanda dos tallas más grande)
Ahh en la ropa sucia
¡Futa madre! Apesta a puro pinche sudor y humedad
nada que un poco de perfume no solucione

Me pongo una cachucha y me voy al llano
no sé como podemos jugar en este pinche potrero
lo bueno es que la cancha esta empastada sino…
sino pues nada, igual y seguiría viniendo a jugar a este muladar.

Basta con dar un par de vueltas a lo ancho de la cancha y pelotear 5 minutos para calentar antes de que comience el partido.
Vas de central, me dicen
¿de central? ¡No mames guey, soy contención! Lo mío es la recuperación y repartir juego para el ataque y cuando se presente la oportunidad, irme a rematar alguna jugada de gol
Ah ¿Qué no vino el Niupi? (el central titular)
bueno, no hay pedo, pero si se me va algún cabrón no me vayan a decir nada, recuerden que no sé jugar la posición

No mamen, está cagado jugar de central, casi no corres, lo único que tengo que hacer es esperar bien parado a los delanteros contrarios y meter duro la pata
que pase el jugador o el balón, pero nunca los dos.

Chingue a su madre, este prietillo es rápido, apenas van dos carreras y ya me puso a sudar.
Mi cuerpo apesta a crudo, a alcohol etílico
no sé por qué no importa lo que haya tomado anoche
fue puro tequila y cerveza pero aunque hubiera sido whisky
o coñac
la cruda hiede igual
y el perfume no disimula nada, pinche aroma penetrante.
Me pongo a pensar que tal vez debería bañarme antes de los juegos
o de jodido peinarme estas mugres greñas de indigente
pero pensándolo bien ¿qué caso tiene arreglarme cuando vengo a sudar como puerco?
¡Verga, ahí viene el pinche prietillo corriendo como si tuviera un chile atravesado a medio culo
Y ya se me fue el cabrón!
Me barro por detrás y alcanzo a puntearle el balón pero el jodido árbitro me marca falta
Voy y lo encaro y le digo en su cara que esta ciego y que el pie fue a la bola
Amarilla
no hay pedo

¡A la derecha, más a la derecha! Dice el portero acomodando la barrera
volteo a verlo y atender sus indicaciones cuando el otro equipo cobra la falta
y el balón va a dar justo en mis guevos
no en el izquierdo
ni el derecho
en ambos
y se llevó de paso a su jefe
¡Puta madre. Cómo me duele!
Miro unos segundos al árbitro antes de desplomarme en el césped y el culero no detiene la jugada
el ojete se está vengando por haberle salpicado de saliva la cara cuando le grité
Mis ojos cerrados solo ven estrellitas y balones que pasan a toda velocidad
supongo que mis compañeros echaron el balón fuera de la cancha porque escucho sus voces alrededor
hijole, me preocupa que me hayan arruinado el aparato
no mamen, ¿Qué tal si tienen que amputarme los guevos?
Me duele mucho
¡Prefiero la muerte!
alguien comienza a estirar y contraer mis piernas y el dolor disminuye
pero es mucha la presión que hacen cuando las aprietan sobre mi abdomen
no puedo evitar soltarme un pedo, un pedo de crudo
Todos se alejan echando pestes
(aunque el que echó las pestes fui yo).

FIN

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